20 Tips para sentirse seguro consigo mismo

Potenciar tus puntos fuertes, es una de las claves que te ayudará a sentirte mejor en tu propia piel. “Necesitamos ser mucho más conscientes de nuestros puntos fuertes, no sólo para potenciarlos, sino para fortalecer en nosotras mismas la confianza en nuestros propios recursos internos a la hora de encarar cualquier situación”, explican desde QuiereTeBien.com, un portal que nace con la vocación de ser “un punto de apoyo para superar los momentos difíciles”.

Porque creemos fervientemente en la necesidad de creer en si mismo –“En la vida siempre hay algo que depende de ti, siempre hay algo que puedes hacer. Echar la culpa a los demás es perder poder. No esperes a que los demás cambien, cambia tú”, aconseja Sonia Almela Ortas, de Cuestión de Coaching y asesora de Ausonia–, hablamos con expertos en coaching para elaborar las claves que te harán sentirte más segur@ y te ayudarán a lograr tus retos.

Objetivo: ser más feliz

2. Cultiva tus puntos fuertes.  “Los genios son los que han cultivado lo que se les ha dado mejor. Si cultivas lo que se te da peor, conseguirás ser normal, pero no serás brillante”, afirma contundente Sonia Almela, rubricando otra afirmación del equipo de QuiereTeBien.com. “Necesitamos ser mucho más conscientes de nuestros puntos fuertes. No sólo para potenciarlos, sino para fortalecer en uno mismo la confianza en nuestros propios recursos internos a la hora de encarar cualquier situación”, afirman.

3. Logros y recursos. Para cultivar nuestras bondades Almela nos propone un sencillo ejercicio: hacer memoria y escribir en un papel los logros que has conseguido en tu vida junto a los recursos que has necesitado para alcanzarlos. “Al final verás que son casi los mismos recursos, precisamente porque son nuestros puntos fuertes”, añade la coach.

4. Celebra tus logros. No te limites a tachar tus pequeños retos de una lista, celébralos de alguna manera porque así los recordarás. O con una pequeña recompensa  –“Celebrarlos con un detalle pequeño te da fuerzas”, apunta Sonia Almela– o simplemente reconociéndolos y valorándolos. “Muchos días bastaría con que fueras capaz de ser consciente de la cantidad de retos que llevas a cabo diariamente, los valoraras y los reconocieras. ¡Qué bien he trabajado hoy! ¡Cuánto me ha cundido el tiempo!...”, nos cuenta Morales, que añade: “Cuando alcances un buen concepto de ti mism@ y te quieras en consecuencia seguro que estarás preparad@ y te apetecerá hacer cosas nuevas”.

5. Aprende de lo errores. Cuando te equivoques, repítete a ti mism@. “Ya sé lo que no debo hacer”. Y es que, tal y como nos explica Lucía Morales, “los errores no son otra cosa que aprendizajes, son el resultado de la puesta en práctica de una decisión, comportamientos que nos indican que por ahí no conseguimos el resultado esperado”. Pero es fundamental no centrarse en la culpabilidad (este sentimiento es “paralizante y dañino", afirma), sino en reparar el daño. “Cuando nos equivocamos nos hacemos responsables de las posibles consecuencias adversas al error y ponemos en práctica una alternativa”, añade la experta.

6. Mímate y habla bien de ti. “Dedícate al menos 5 o 10 minutos al día solo para ti. Sólo si te quieres tú, podrás querer a los demás”, nos recuerda la directora de Cuestión de Coaching. Y eso implica desterrar cualquier término peyorativo hacia ti. “Escúchate hablar sobre ti y observa tus propios pensamientos: ¿Es así cómo hablarías a una amiga? Peor aún: ¿Hablarías así a alguien que te cayera muy mal? Probablemente nunca hablarías a nadie con la dureza y puede que incluso con la crueldad con la que te hablas a ti mism@. Toma conciencia de ello y empieza a tratarte con más dulzura y comprensión”, afirma el equipo de QuiereTeBien.com.

7. Abraza, ríe y llora. Aunque tendemos a pensar que las personas que no muestran a los demás sus sentimientos son más seguras de si mismas, los expertos recomiendan fervientemente mostrarlas si es necesario. “Las emociones son sinceras. Las personas que se quitan las corazas son personas seguras de sí mismas”. Así que abraza, llora y ríe. “Ríete aunque no te apetezca: 20 segundos sonriendo cambia el estado de ánimo”, afirma Sonia Almela, a lo que los expertos de QuiereTeBien.com añaden: “Los músculos que utilizamos para sonreír están conectados con nuestro sistema nervioso central y, cada vez que sonreímos, liberamos una hormona (la beta-endorfina) que lleva a la mente el mensaje de que todo está bien”. Busca vídeos divertidos en youtube o mira fotos que te traigan buenos recuerdos.

8. Céntrate en ti. ¿Cuánto tiempo pierdes al día analizando lo que han hecho los demás? Se trata de un error habitual que hay que evitar. “Todo lo que no sea centrarte en ti y en cómo quieres comportarte es una pérdida de tiempo y energía”, afirma Lucía Morales. “No esperes a que los demás cambien, cambia tú. Porque echar la culpa a los demás es perder el poder”, añade Sonia Almela.

9. Reflexiona y habla. Es fácil creer que no se puede hacer nada ante una situación negativa porque “no depende de mí”, aunque este pensamiento no es más que una excusa. “Siempre hay algo que depende de ti. Siempre hay algo que se puede hacer”, explica Almela, que recomienda reflexionar ante cualquier situación con esta pregunta: ¿Qué recurso que dependa de mí necesito para seguir adelante? Y es que la experta insiste en el poder de lenguaje. "Repítete: puedo y quiero".

10. No lo evites. A menudo, cuando pensamos en situaciones que nos asustan tendemos a evitarlas pensando que desaparecerán. Pero no es así. “La evitación es un comportamiento muy generalizado. Creemos que nos protege de las posibles emociones negativas que nos haría sentir el afrontamiento. Sin embargo, afrontar los problemas de cara, analizando la situación y pidiendo consejo si es necesario, nos dará como resultado salir reconfortado y nos servirá para afrontar situaciones similares en el futuro”, subraya Lucía Morales. En estos casos, Sonia Almela recomienda analizar y hablar del obstáculo que nos atemoriza. “Debes preguntarte si lo puedes solucionar. Si puedes, hazlo, si no se puede, acéptalo, no te resistas. Pero no lo dejes pasar porque así harás crecer el fantasma".

11. Ten perspectiva. Es otra de las terapias que propone la experta de Cuestión de Coaching ante retos que nos preocupan. “Piensa en ese reto (por ejemplo una presentación de trabajo que tienes que hacer y te asusta) y piensa también en lo que pasará, por ejemplo, dos días después. Verás que la vida continuará con normalidad después de ese día y de ese reto”, aconseja la experta, que propone otra reflexión similar para los momentos menos gratos. “Cuando lo estés pasando mal piensa. ¿Qué pensaré de esto dentro de 20 años? Probablemente la respuesta te aliviará”, afirma.

12. Prepárate.  Amela lo tiene claro: "El cerebro es una máquina a la que le cuesta distinguir imaginación de realidad". Precisamente por eso, cuando tengas que enfrentarte a una situación nueva que te preocupe imagínate haciéndolo con todo lujo de detalles. "Y repítelo en tu mente una y otra vez. Y cuando estés en escena actúa como si ya fuera una rutina para ti", aconseja la experta.

13. Eres responsable. Sí, eres responsable, pero tanto de lo que haces como de lo que no haces. Cuando no lo haces estás decidiendo y esto también marca tu vida. “No des tu bolígrafo a otra persona para que escriba tu historia. Escríbela tú ”, aconseja Almela.

14. Carpe diem.  Puede resultar una afirmación manida, pero disfrutar el presente es la camino definitivo a la felicidad. “Hay dos días de la semana en los que no puedes intervenir: ayer y mañana”, sentencia rotunda Morales. “Un error muy común es estar más centrado en lo que me pasó ayer o en tiempos anteriores (fracasos, rencores…) y en lo que me puede pasar mañana (casi siempre visto desde un punto de vista fatalista, miedo…) que en el presente y en el disfrute del hoy. Y precisamente esos pequeños detalles son los que nos proporcionan felicidad”, añade la coach.

15. Crea tu lenguaje de confianza.  “El lenguaje tiene el poder de cambiar el mundo”, sentencia rotunda Lucía Morales. De ahí la importancia de transformar el lenguaje en afirmaciones positivas. “Otro ejercicio muy práctico es escribir una lista de frases negativas y asociarlas con su respuesta positiva correspondiente para que después de una sencilla práctica diaria consigas el hábito de ser más segur@”, afirma. ¿Un ejemplo? “Transformar el 'tengo miedo' por 'soy valiente'; 'no es tan importante' por 'mis sueños son muy importantes', '¿merece la pena seguir?' por '¿merece la pena tirar la toalla?; 'me rindo' por 'el éxito está a la vuelta", nos cuenta la experta.

16. Confía. Pero confía en ti y también en la gente. "Si desconfías de todo el mundo no avanzas y no eres feliz. Confía en los demás", aconseja Sonia Almela. Aunque sea difícil, inténtalo; hay algo que se llama diplomacia. 

17. Crea tu lista Spotify. Porque la música es capaz de cambiar emociones, la experta de Cuestión de Coaching aconseja algo tan sencillo como crear tu propia lista de temas que te hacen sentir bien y te suben el estado de ánimo. También te cambiará el ánimo frases y pensamientos motivantes. “El cerebro actúa con el lenguaje. Dale frases positivas como 'Me lo merezco' o 'Llegó mi momento", añade.

18. Las críticas son regalos. Aceptar las críticas como algo constructivo y no como algo personal (y ofrecerlas de la mism@ manera) es un signo inequívoco de confianza y autoestima. “Cuanto más conocimiento tenga de mí mismo y mejor concepto, seguramente podré escuchar atentamente lo que me dice el otro y recibirlo como un regalo y, por tanto, hacer con ellas lo que se hace con los regalos: lo agradezco y después decido qué quiero hacer con él”, explica Lucía Morales.

19. Cambia la rutina.  En términos de coaching es recurrente hablar de dos términos: zona de confort y zona de desarrollo. “La zona de confort es donde nos movemos día a día, hábitos, costumbres, rutinas… parece que es donde nos sentimos cómodos. Es lo conocido, puede estar bien pero nos sitúa en la inmovilidad, en el estancamiento”, explica Lucía Morales. “La de desarrollo es el aprendizaje que se produce cuando uno sale de la zona de confort, es entonces cuando se produce un crecimiento personal”, añade la experta, que recomienda trabajar ese desarrollo cuando “llega ese momento en la vida en el que sentimos esa necesidad de cambio. Si partimos de esa voluntad el esfuerzo nos producirá satisfacciones”, subraya.

20. La vida es impredecible. Sonia Almela nos propone otro ejercicio fundamental: entender la incertidumbre y todo lo que no es controlable como un mundo de infinitas posibilidades. “Sólo si te haces cargo de tu propia felicidad será feliz”, afirma.  A lo que Lucía Morales, añade: “La vida es pura incertidumbre, pero debemos aceptar esta circunstancia  y disfrutar del presente (sin olvidar nuestros proyectos de vida, claro). Toma las riendas de tu vida (que no es lo mismo que controlarla) y disfruta en su devenir de todas las cosas que la vida nos ofrece”. Y cuando esas cosas las sintamos como negativas, la experta aconseja verlas en perspectiva. “Así se vuelven positivas y enriquecedoras, sobre todo si sabemos hacer un buen análisis de ellas”.

(Con informacion de Vogue.es)